Ahora tenemos la oportunidad de adecuarnos a los tiempos que corren y replantear todas nuestras estrategias, mensajes y actuaciones. Los socialistas moralos celebramos ayer una asamblea para intentar analizar los pésimos resultados electorales a los que, como en casi todos los sitios, hemos asistido. Bien es verdad que las desgraciadas circunstancias que impregnaban la reunión, quizás pudieron hurtar parte del debate profundo que se podría haber hecho. Pero eso no quita para que, precisamente a raíz de esas desdichadas circunstancias, estemos en condiciones de revisar todo lo que veníamos haciendo y todo lo que tendremos que hacer.
Por supuesto que aquí no vamos a ser una excepción, como por otro lado se nos trasladó por parte de los responsables provinciales, y el tercer fracaso electoral consecutivo (me refiero a elecciones locales) va a ser sólo por culpa nuestra, es evidente. Como en el resto de los sitios, los ciudadanos también han dado en Navalmoral su voto de castigo a las necesarias, a mi entender, políticas de ajuste emprendidas para evitar que nos intervengan por quien en su anterior legislatura fue el responsable de innumerables progresos sociales que ahora parecen haber surgido por generación espontánea. Pero lo que también es evidente es que alguna parte alícuota de responsabilidad sin duda también tendremos.
Y nuestra obligación creo debe ser la de refundar la Agrupación Morala en el sentido más amplio de la palabra, aprovechando precisamente esas desgraciadas circunstancias y dar paso a nuestros jóvenes, que los tenemos en número y con ganas suficientes. Y sin aparcar del todo la experiencia que muchos de nosotros hayamos podido atesorar, pero sí midiendo las dosis estrictamente necesarias, organizar de nuevo una opción política en la que se sienta representado nuestro electorado y con éste retomar la senda progresista de la que hace años se salió Navalmoral.
Lo que podría ser un descabezamiento más o menos traumático de la Agrupación, debemos convertirlo en la oportunidad de conseguir un necesario renacer, cambiando todo lo que debamos cambiar y aportando cada uno de nosotros y nosotras todo lo que podamos aportar, poniendo al frente de ese proyecto a gente mucho más acorde con los tiempos, que afortunadamente tenemos en nuestras filas.
Y podemos empezar por el propio Ayuntamiento. Tenemos sólo cuatro concejales, pero de los cuatro, al menos tres no están en absoluto ni quemados ni "contaminados", por decirlo de alguna forma, por el pasado. De hecho parece que, como por otro lado es natural, será Raquel Medina nuestra nueva portavoz municipal. Es seguro que ésta no tiene experiencia municipal alguna, pero eso lejos de ser un problema, yo creo que va a a ser una ventaja. Ahí estaremos muchos detrás para echar una mano si fuese necesario y poner al servicio de los"nuevos" toda nuestra experiencia. Pero entre bambalinas y sin intentar manejar nada, que creo ya no procede si de verdad queremos volver a conectar con la ciudadanía.
Me gustaría que los demás compañeros y compañeras de mi generación y de generaciones anteriores, que también los tenemos, coincidiesen conmigo en esta forma de ver la actual realidad de la Agrupación y las posibilidades que estoy convencido se nos brindan en estos momentos. Por otra parte y a la vista de las intervenciones que se produjeron en la reunión, estoy seguro de que en esto la mayoría estamos de acuerdo. Solo necesitamos pues que la nueva sabia con la que contamos de pasos al frente y lideren el proyecto con nuevas ideas y renovadas ganas, que ahí estaremos los demás cubriendo la retaguardia.
1196. Diario en tiempo de coronavirus
Hace 4 años
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